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Que levante la mano aquel que no haya necesitado en algún momento hacer algo con una fuente de corriente. Acostumbrados a funcionar con fuentes de tensión, una fuente de corriente constante nos puede sacar de algún apuro en casos de medida de sensores, etapas diferenciales, polarización de resistencias o semiconductores, etc.

Actualmente existe una gran variedad de fuentes de corriente cada una con unas características distintas y hechas para una necesidad concreta. Fundamentalmente se pueden distingiur de dos tipos: Las que funcionan con transistores y las que funcionan con amplificadores operacionales. Las que funcionan con transistores utilizan la corriente que circula por una unión PN para generar otra corriente idéntica o proporcional. Ejemplos de estas son las de un transistor, espejo de corriente, Widlar o Wilson. La fuente de corriente realizada con un amplificador operacional más conocida, es la fuente Howland. No obstante en esta nota de aplicación de Linear Technology aparecen muchas más.